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Diario La Nación
Jueves 02 de junio de 2011 | Publicado en edición impresa
LA PLATA.- El gobierno de la provincia de Buenos Aires anunció ayer que construirá 1000 viviendas de 55 metros cuadrados, que otorgará mediante créditos hipotecarios del Banco Provincia, con una cuota subsidiada de entre 1200 y 2000 pesos, para que las familias puedan acceder a su primera propiedad.
Además, el banco aprobará 5000 créditos hipotecarios para municipios del interior de menos de 100.000 habitantes, cuyos habitantes podrán acceder a su vivienda con una cuota de $ 2000, a una tasa fija del 10% anual y a 20 años, y por una suma de hasta $ 200.000.
La entidad financiera también anunció que, para facilitar el alquiler de viviendas, dará garantías por un monto de hasta $ 120.000, que se otorgarán por 24 meses. El alquiler no podrá superar el 30% de los ingresos del cliente, que abonará el canon mensual en una cuenta a su nombre en el Bapro. La comisión al locatario será del 5,5% sobre el aval.
El gobernador Daniel Scioli anunció ayer estas y otras medidas destinadas a brindar soluciones habitacionales, que incluyen el uso social de tierras públicas y loteos con servicios.
Una de las iniciativas apunta a «darles productividad a tierras improductivas», a partir de relevamientos realizados por diferentes organismos. La ministra de Infraestructura, Cristina Alvarez Rodríguez, detalló el programa de loteos sociales con servicios, al que ya han adherido 11 municipios, tanto del conurbano como del interior provincial. Participaron también de la reunión los ministros Eduardo Camaño (Gobierno), Alejandro Arlía (Economía), Ricardo Casal (Justicia y Seguridad), el director del Instituto de la Vivienda, Gustavo Aguilera; el subsecretario social de Tierras, Pablo Gualchi, y el coordinador ejecutivo del programa Soluciones Ya!, Eduardo Aparicio.
Algunas de estas disposiciones estaban incluidos en un anteproyecto de ley de hábitat popular, que proponía que los countries cedan tierras para la construcción de viviendas sociales. Luego de la polémica desatada en torno al anteproyecto de ley, el gobernador decidió avanzar con las medidas que no suscitaron debate.
María José Lucesole